jueves, 17 de abril de 2008

AMERICAGADAS


En un post anterior, hablaba de la poca confianza que tenía en los americanos y en la NASA. Pues bien, si antes tenía dudas, ahora ya lo tengo del todo claro: un niño alemán de 13 años ha tenido que corregir los cálculos efectuados por los “expertos” de la NASA con respecto a las probabilidades de que un asteroide choque con la Tierra en 2029 o en 2036.
Pero no creáis que el error ha sido de un cero, que ya de por sí sería bastante grave; no, es de varios... Y lo que es peor: el resultado de ello es que las probabilidades de colisión son muchísimo mayores de las que pronosticaba la NASA.
¡Es totalmente inadmisible, de verdad! ¡Es que estas cosas me indignan sobremanera! Tantos miles de millones de dólares dedicados a costear una organización de ese calibre (personal hiperespecializado, pruebas superespecíficas, aparatos megasofisticados...) para que venga un chaval y, haciendo cuatro números, ponga de manifiesto que “el gigante” hace las cosas mal...
En lugar de mirar tanto a la luna, más valdría que miraran un poco más al suelo, que es donde están el hambre, las enfermedades, la pobreza... Y ésos sí son problemas reales que han chocado con la Tierra y que necesitan una inyección de inversión.
Me pregunto cuál será la probabilidad de que vuelvan a cagarla en breve. Propongo que se plantee como un problema en las clases de matemáticas de escuelas e institutos. Será más fiable.

4 comentarios:

PIZARR dijo...

Pues no había oido lo del tema del niño... pero no hace falta, tienes toda la razón, nunca he comprendido esas cifras astronómicas para mirar a la luna, cuando con mucho menos podrían mirar a la tierra y resolver muchos de los graves problemas que la acechan.

Un beso desde el Mundo de los Sueños.

Anónimo dijo...

Hola, Pizarr, me alegro de que sigas visitándonos.
Ya sé que no vamos a conseguir cambiar nada, que nadie nos va a hacer caso, pero al menos nos quejamos. Es lo mínimo que podemos hacer... :)
Un beso escarlata

Azpeitia poeta y escritor dijo...

Gracioso y sorprendente....hemos sofisticado todo tanto, que un caracol puede desatar la tercera guerra mundial...te seguiré leyendo...un abrazo de azpeitia

Anónimo dijo...

Bienvenido, Azpeitia, espero que ya estés recuperado del todo...
Uf, ojalá los señores de la guerra, esos que rigen nuestros destinos, dedicaran más tiempo a leer (o escribir) y no tanto a pensar maneras de enriquecerse a cualquier precio. Viviríamos todos más tranquilos...
Un abrazo escarlata